Vida
Nació en Santander en
1896. Como otros muchos poetas de la Generación del 27, Gerardo Diego fue
profesor; en concreto fue catedrático de Literatura en institutos de Soria,
Santander y Madrid. En 1947 ingresó en la
Real Academia. Son muchos los premios que recibió a lo largo de su vida, desde
el Nacional de Literatura en 1925 (junto con Alberti), hasta el Cervantes en
1979. Murió en Madrid en 1987.
Dentro de su generación
ejerció un importante papel impulsor. Fue fundamental su Antología de 1932 que constituyó casi un “manifiesto” del grupo.
Poética:
dos caminos
La
poesía de Gerardo Diego ofrece, curiosamente, dos direcciones muy distintas: la
poesía
de vanguardia y la poesía “clásica” o “tradicional”. Y
ambas cultivadas con la misma autenticidad. Él mismo confesó: “Yo no soy responsable de que me atraigan
simultáneamente el campo y la ciudad, la tradición y el futuro; de que me
encante el arte nuevo y me extasíe el antiguo; de que me vuelva loco el
capricho de hacérmela –nueva- para mi uso particular e intransferible.”
Tanto
los poemas de un tipo como de otro se caracterizan por una gran maestría
técnica. Y con igual dominio aborda los temas más diversos, ligeros o
profundos.
Obra
En la
línea vanguardista es el máximo representante español del Creacionismo que defendía
el puro juego de la imaginación, que la poesía debía “crear” un mundo propio,
ajeno a la realidad (aunque derivado de ella). Él mismo lo expresó con estas
palabras: “Creer lo que no vemos, dicen
que es Fe; crear lo que nunca veremos, esto es la Poesía.”
A
este tipo de poesía pertenecen sus originales libros Imagen (1922) o Manual
de espumas (1924).
Dentro
de la línea tradicionalista, encontramos los temas y formas más variados.
Destacan sus sonetos, romances, décimas… pero también emocionan sus
cancioncillas de tipo popular.
En
esta vertiente podemos citar Soria (1923), Versos humanos (1924), Versos
divinos (1938-1941) y, sobre todo, Alondra de verdad (1941), espléndida colección de sonetos,
entre otros muchos títulos.
No hay comentarios:
Publicar un comentario